La Casa Castellano-Manchega y la Casa de Extremadura de Leganés tenían este pasado sábado eventos tradicionales, de esos que mantienen vivas las costumbres de las comunidades.
La tradicional «matanza» ha dado lugar en estos tiempos a una comida popular típica de la autonomía, unas migas con sus acompañamientos y, lo mejor, la compañía, el buen hacer y el gusto por compartir la identidad.
Por otro lado, la Casa de Extremadura estaba de cumpleaños, 40 aniversario, cuarenta años nada más y nada menos en nuestro municipio, diferentes generaciones participando y construyendo ciudad.
Un sábado repleto de actividad y simpatía. Por nuestra parte, siempre agradecidos de estar con la gente de las casas regionales que nos han dado tanto a la ciudad.
